ya tenía que ser burro el niño

Nací en Córdoba de unos padres huelvanos (riotinteños a más señas) que vivieron allí un tiempo hasta que a mi papá lo destinaron a Málaga. Vine a Málaga con poco más de tres años. Rebuscando en los álbumes he encontrado la razón por la que no tengo fotos con el burrito. Porque era muy malo. Era tan malo que mi madre me encerraba en la rejilla del brasero. Y si seguía dando guera, incluso lo encendía. Con lo cual se infieren dos conclusiones: 1) No soy malagueño o (lo cual yo prefiero) pertenezco a esa raza especial de malagueños tristes sin fotos en el burro. 2) Era un llorica.